jueves, 29 de enero de 2009

La ampliación del canal enfrenta "colapso"

El gobierno panameño anunció que endeudó al país en 1,110 millones de dólares adicionales al suscribir un préstamo con varias agencias internacionales, incluyendo el BID y el Fondo Andino. El préstamo tendría como propósito apoyar a la banca panameña ante los recortes de créditos provenientes de los entes financieros internacionales tradicionales. El presidente Martín Torrijos no informó cual es el marco legal de este nuevo empréstito. Hace varias semanas Torrijos también anunció que el país suscribía un préstamo que superaba los 2 mil millones de dólares para financiar parcialmente la ampliación del Canal de Panamá.
La ampliación del Canal, sin embargo, se enfrenta a la peor crisis del comercio marítimo mundial desde la década de 1930. La empresa Lloyd’s List informó que cinco empresas de transporte marítimo de contenedores han reducido sus rutas debido a la recesión económica que golpea el comercio mundial. Se trata de las navieras APL, Haburg Sud, Hapag-Lloyd, Hyundai Merchant marine y Evegreen. Los recortes afectan especialmente los puertos de Oriente. Igualmente, la línea marítima Mitsui OSK de Japón abandonó sus planes de establecer un nuevo servicio entre los puertos principales de Asia y EEUU.
Más preocupante es la noticia de la misma fuente anunciando el “colapso” de los puertos de Long Beach y Los Angeles en las últimas semanas como consecuencia de la recesión económica (meltdown) mundial. El puerto de Long Beach reportó una disminución del 11 por ciento del movimiento de contenedores. Es la disminución más fuerte experimentada en los últimos 20 años. Sólo en el mes de diciembre, el puerto de Long Beach disminuyó su movimiento en un 25 por ciento. En el caso de Los Angeles la disminución del movimiento de contenedores en 2008 fue del 6 por ciento y en el mes de diciembre fue del 15 por ciento.
Lo que experimentan los puertos de Long Beach y Los Angeles es importante tenerlo en cuenta debido a la similitud que tienen con los servicios que presta el Canal de Panamá. En el caso de Long Beach, el cambio ha sido muy rápido. En 2007, este puerto experimentó su año más ocupado con un tráfico de 7.3 millones de TEU (medida de contenedor). Al igual que el Canal de Panamá, en 2008 el tráfico disminuyó, aunque de una manera más fuerte. El tráfico total bajó a 6.4 millones de TEU. En noviembre y diciembre de 2008, las exportaciones disminuyeron en un 23 y 34 por ciento, respectivamente. El patrón seguido por Los Angeles fue similar bajando de 8.4 a 7.8 millones de TEU entre 2007 y 2008.
HSBC Global Research, sección de investigaciones del banco sino-británico, hace proyecciones muy pesimistas, señalando que las tarifas del comercio marítimo sufrirán bajas significativas, poniendo en peligro la existencia de las navieras. HSBC predice que el comercio marítimo en contenedores se estancará en 2009 y que en 2010 puede recuperarse un poco. Casi todas las navieras anuncian pérdidas para 2009.
Mientras que el gobierno panameño sigue endeudándose para beneficio de unos pocos intereses particulares, el entorno mundial se desmorona. Las deudas las pagarán nuestros hijos y nietos, mientras que quienes gobiernan desde las cúpulas y sus asociados saldrán enriquecidos por las decisiones que están tomando.
Panamá, 29 de enero de 2009.

La política electoral a tres bandas

Faltan un poco más de tres meses para que se celebren las elecciones generales en Panamá. Se reemplazará al presidente de la República, se elegirán 71 diputados, cerca de 60 alcaldes y más de 600 representantes de corregimiento (concejales). El quinquenio del presidente Martín Torrijos (2004-2009) será recordado como uno más, comprometido con las políticas neoliberales impuestas por las instituciones financieras internacionales, generando mayores ganancias (crecimiento económico) para los especuladores y más pobreza entre los trabajadores y en las capas medias. Su gestión será recordada por haber incrementado las desigualdades sociales y económicas en el país.
Apenas faltando 100 días para el 3 de mayo, hay dos cosas que resultan novedosas. Por un lado, Ricardo Martinelli, candidato del pequeño Partido Cambio Democrático, se ha colocado a la cabeza de las encuestas de opinión pública con más del 40 por ciento de las preferencias. Por el otro, Juan Jované, candidato independiente de la izquierda, a pesar de su batalla legal para que le reconozcan su derecho a postular a la Presidencia de la República, sigue marginado de la contienda electoral.
Martinelli fue el más débil de los cuatro candidatos en 2004, reuniendo el 7 por ciento de los votos. Fue derrotado por Torrijos, del Partido Revolucionario Democrático (PRD), quien obtuvo el 47 por ciento de los votos. El triunfo de Torrijos en 2004 marcó una tendencia hacia la alternabilidad en las elecciones presidencias de Panamá. Durante 20 años, el PRD y el Partido Panameñista se han alternado en el poder y la mayoría de los observadores políticos pensaban que se había instaurado una especie de bipartidismo en Panamá.
Todo indica que la aparición de Martinelli en el escenario rompe la tendencia hacia la alternabilidad en Panamá y acaba con el bipartidismo. Durante casi 20 años - desde la invasión militar de 1989 - los asesores norteamericanos quienes se proyectan en forma permanente desde la Embajada de EEUU hacía los círculos políticos panameños, apostaban a estas dos cartas, abanicando la alternabilidad y el bipartidismo como “la” fórmula que garantizaba la democracia.
La aparición de Martinelli significa que la política electoral de Panamá se abrió a tres bandas. Los dos partidos que supuestamente deberían representar mejor los intereses del capital nacional y el de EEUU fracasaron en su misión. El Partido Panameñista se hundió a principios de la década de 1990 cuando el presidente Endara declaró que el no pretendía resolver los problemas del país. A fines de esa misma década, Pérez Balladares del PRD fue repudiado por sus ansias de poder. Los dos presidentes que siguieron, Mireya Moscoso y Martín Torrijos, fracasaron en definir un proyecto de país, aún dentro de los marcos de gobernabilidad neoliberal.
Las encuestas indican que no ha habido mayores cambios en la distribución de las preferencias del electorado panameño. El PRD – una alianza de fuerzas políticas encabezada por el capital financiero - conserva su base electoral de un tercio (33 por ciento) de las preferencias. La oposición más conservadora – capitales agrario, industrial y comercial – acapara el 50 por ciento de la base electoral. En las últimas tres elecciones el sector más conservador se dividió y en dos ocasiones le permitió ganar al PRD. En 2009 las fuerzas conservadoras siguen con el 50 por ciento del electorado. Sin embargo, no se ha dividido en dos partes iguales permitiéndole al PRD aprovechar la diferencia. El Partido Panameñista, y su candidato Juan C. Varela (las encuestas le dan el 15 por ciento de las preferencias), se hundieron dejándole el camino abierto a Martinelli.
La diferencia que están descubriendo las encuestas de principios del presente año es que el discurso del capital conservador ha penetrado con más éxito al conjunto del electorado. Cansados del creciente empobrecimiento de los trabajadores y de las capas medias, en medio del despilfarro de una clase “transitista” y de discursos de prosperidad, las preferencias del pueblo rechazan tanto al PRD como al Partido Panameñista. Se ha enganchado a los cantos de sirena de un viejo político zorro quien hábilmente ha jugado la carta del cambio (lo introdujo mucho antes que Obama apareciera en el escenario político). Martinelli no tiene propuesta ni tampoco un programa de gobierno. En cambio, ha montado una guerra propagandística que golpea sin descanso a los candidatos de los partidos tradicionales que sólo ofrecen “más de lo mismo”.
La oportunidad que la presente coyuntura electoral le ofrece a Martinelli tiene dos aristas. Por un lado, el colapso de las propuestas neoliberales que han acabado con los programas sociales del país, han puesto en peligro el futuro del Canal de Panamá y prometen más pobreza, hacen que la gente busque una figura de cambio (aún cuando la “medicina” conservadora probablemente resulte peor que la enfermedad neoliberal). Por el otro, la candidatura de Juan Jované, a la izquierda del espectro político, no encuentra un pueblo unido y es bloqueada por una clase oligarca cerrada, dispuesta a desestabilizar al país (repitiendo experiencias similares a las de 1947, 1968 y 1989).
Panamá, 22 de enero de 2009.

jueves, 15 de enero de 2009

Panamá 2009: El rancho arde

Después de varios meses de silencio frente a la crisis financiera internacional, el gobierno del presidente Martín Torrijos abrió una pequeña ventana para que el país se informara sobre sus planes. Un diario de la localidad informó que “desde mediados de noviembre, el Gobierno planteó la posibilidad de crear un programa de apoyo a los bancos, como una contingencia en caso de que necesitaran fondos”. El vicepresidente, Samuel Lewis Navarro, quien encabeza el equipo político quiere crear un “fondo para apoyar el crédito bancario, no por falta de liquidez, sino porque los bancos corresponsales han restringido sus líneas de créditos o han impuesto limitaciones”.
En sectores bancarios se está especulando que el gobierno podría destinar mil millones de dólares del Fondo Fiduciario para el Desarrollo (FFD) para crear el “fondo de apoyo a la banca”. El gobierno ha restringido al máximo la información sobre el FFD. Apenas en diciembre de 2008 dio a conocer el estado financiero del Fondo correspondiente al primer trimestre, con nueve meses de atraso. En vez de enfocar el problema de manera integral, el gobierno sólo se preocupa del sector bancario y como salvarlo de la crisis que se aproxima.
Cuando ves la barba de tu vecino arder... Hasta la fecha el gobierno panameño no reacciona ante las llamas que arden por todos los costados. Los burócratas incrustados en el poder insisten en que Panamá pasará la crisis sin sentir los efectos de la recesión mundial. No ha hecho un estudio sobre el impacto que la crisis tendrá sobre el agro, sobre el comercio, sobre la construcción, sobre la ZLC, la banca y se ha cerrado totalmente a revisar su falta de política en torno al futuro del Canal de Panamá. INDESA, una empresa privada contratada por el gobierno para funcionar como su Ministerio de Economía, ya pronosticó una disminución del 40 por ciento del crecimiento económico de Panamá en 2009 (del 9,5 al 5,5%). La CEPAL pronostica un crecimiento del 4,5% (una pérdida superior al 50%).China se ha convertido en el socio comercial más grande de Panamá, después de EEUU. Ambos países están reduciendo su producción, dejando sin empleo a centenares de miles de trabajadores por mes y sus exportaciones disminuyen rapidamente. Panamá sentirá el golpe de la recesión de manera muy especial por encontrarse muy arriba en la cadena productiva mundial, gracias a su posición geográfica, la operación del Canal y ser intermediaria comercial (Zona Libre de Colón y los servicios bancarios).
Existe la idea equivocada (¿o perversa?) en la Presidencia de la República, que los intereses de sus amigos financistas mejor colocados saldrán bien parados de la crisis. Les importa poco la suerte de los demás panameños que sufrirán el embate de la depresión económica. La masa de trabajadores, de la cual más de la mitad se encuentran en el sector informal, se verán abrumados por la pérdida de los pocos puestos estables que ofrece la economía panameña. Los que logran salvar su empleo verán disminuir sus niveles de vida de manera violenta e, incluso, ya no serán sujetos de crédito.
¿Qué hay que hacer? En más de una ocasión Juan Jované, candidato independiente a la Presidencia de la República, ha planteado la necesidad de comenzar inmediatamente a ejecutar un plan de emergencia que contemple impulsar la producción en los sectores estratégicos del agro y de la manufactura. Además, hay que invertir en obras públicas, especialmente en la construcción de planteles de educación e instalaciones de salud. Este plan de emergencia tiene que estar amarrado a un Plan de Desarrollo Nacional que contemple estrategias a largo plazo (30 años) y mediano plazo (15-20 años) que le permita al país y su gente "navegar" con éxito en las aguas turbulentas de un capitalismo mundial que sufre una crisis profunda.
Hay que sacar de las oficinas públicas a los tecnócratas ineptos que han empobrecido al país con sus improvisaciones reclamando más intervención estatal para sus iniciativas monopolistas que bautizan con nombres ridículos como “mercado libre” y “globalización”. Ellos mismos han prendido las llamas que arden y ahora se niegan a apagarlas.
Toda crisis también representa una oportunidad. Hay que aprovechar la situación actual para cambiar de rumbo en forma rápida y eficaz. En vez de seguir navegando sobre aguas que nos llevarán a una caída mortal, comencemos a remontar la corriente en busca de puertos más seguros donde todos los panameños tendrán oportunidad de desplegar sus potenciales.
Panamá, 15 de enero de 2009.

miércoles, 7 de enero de 2009

La heroica resistencia de Gaza

But we know too well that our freedom is incomplete without the freedom of the Palestinians … --- Nelson Mandela, 4 de diciembre de 1997.
(“Sabemos muy bien que nuestra libertad no es completa si no hay libertad en Palestina…”)

Los recientes ataques aéreos, navales y terrestres por parte de Israel contra la Franja de Gaza parecieran marcar el principio del final del Estado de Israel. El bombardeo navideño de Gaza y la invasión terrestre a la franja palestina de sólo 350 kilómetros cuadrados, sin defensas y cercada, ha causado cerca de 600 muertes en apenas 12 días. De la misma manera que los nazis, quienes durante su paso por el poder en Alemania (1933-1945), obligaron a los judíos a vivir en guetos y los eliminaban poco a poco, ahora Israel está repitiendo la historia en Palestina.
A los alemanes les costó aprender que no se puede eliminar a un pueblo mediante tácticas de exterminio o de “soluciones finales”. Todo indica que los jefes del Estado de Israel no quieren aprender las lecciones de la historia. Gaza se suma a las heroicas resistencias de Varsovia, Minsk y Kiev, cuando judíos encerrados en guetos fueron masacrados por los nazis.
Durante los últimos dos años, Israel no ha permitido que entren a Gaza los alimentos indispensables, medicamentos, personas ni cualquier forma de ayuda al millón y medio de personas que viven en la Franja de Gaza. El Ejército de Israel ha convertido a Gaza en una cárcel – en un gueto – para toda su población. Israel, incluso, prohíbe el ingreso de periodistas a la Franja de Gaza. Tampoco ha permitido durante los últimos dos años que salgan de Gaza personas en busca de atención médica, estudios o viajes de emergencia.
¿Se trata de una táctica de Israel para defender los territorios que ha colonizado en el desierto palestino? A pesar de la resistencia de un pueblo en armas, Israel continúa con su política de limpieza étnica eliminado la población palestina de Gaza e, igualmente, de otras ciudades, incluso Jerusalén. El Estado de Israel ha expulsado a millones de palestinos con el pretexto de estar garantizando la seguridad de sus colonos. En la Alemania nazi también era común que una vez expulsados los judíos de sus barrios y casas, fueran reocupados de una vez por alemanes.
Los panameños sabemos que significa ser atacados por oleadas de aviones que lanzan sus bombas sobre la población indefensa. La ciudad de Panamá fue bombardeada en 1989 por una Fuerza Aérea norteamericana sesgando la vida de miles de personas inocentes. Los panameños estamos aún traumatizados por la experiencia, viviendo bajo gobiernos dependientes de EEUU desde entonces. El saqueo sistemático de las riquezas del país en los últimos 20 años ha empobrecido a la población y colapsado todos los servicios sociales.
¿Será que Panamá se está viendo en el espejo de Palestina? Para recuperar nuestras riquezas secuestradas ¿tendremos que organizar una insurrección similar a la de enero de 1964 cuando la juventud panameña obligó a EEUU a negociar y finalmente evacuar sus bases militares del Istmo?
Un pueblo no puede vivir prisionero en su propio país. Los panameños lo sabemos, lo combatimos y estamos preparados para continuar la lucha. Los palestinos también están concientes de su situación y no descansan en su lucha. La razón y la victoria final está de su lado. ¿Cuándo entenderá el Estado de Israel que no hay bombas suficientes, ni aviones de guerra en el mundo, capaces de detener la marcha del pueblo palestino hacia la constitución formal de su propia nación? La solución no es militar y mucho menos una “solución final” a la nazi.
El relator de derechos humanos de las Naciones Unidas, Richard Falk, denunció el ataque israelí como un crimen de guerra el mismo día que Israel comenzó a bombardear a Gaza el 27 de diciembre.
Las bombas israelís que caen del cielo, la invasión de tanques y las muertes que están causando en Gaza descubren 9 grandes verdades que se esconden en la ambigüedad de los medios de comunicación:
1. La ofensiva militar responde a la política interna del Estado de Israel. Es una estrategia que le está costando centenares de vidas a los palestinos concebida por los partidos Social Demócrata y Kadima, del ex primer ministro Ehud Barak, y de la candidata a primera ministra, Tzipi Livni, respectivamente, para frenar a Netanyahu, que, al frente del Likud, puede ganar las elecciones en febrero de 2009.
2. Israel rompió la tregua con Hamas (Movimiento de Resistencia Islámica) hace dos meses, el 4 de noviembre, el día de las elecciones presidenciales en EEUU. Según Israel la violación del cese al fuego era para impedir que se excavaran túneles hacia territorio israelí. Al día siguiente, cortó los suministros de alimentos, carburante, medicinas y otras necesidades en un intento de “someter” a los palestinos.
3. El presidente Bush y el presidente electo Obama, en abierta alianza con el lobby israelí, coinciden plenamente en apoyar la masacre del pueblo palestino en Gaza.
4. En junio de 2008, ante el Comité de Asuntos Públicos EEUU-Israelí (AIPAC), Obama dijo “Seré claro. La seguridad de Israel es sacrosanta. No es negociable... Cualquier acuerdo con el pueblo palestino debe conservar la identidad de Israel como un Estado judío. Jerusalén seguirá siendo la capital de Israel, sin divisiones”.
5. Europa, con su apoyo a los bombardeos de Gaza, se ha convertido en cómplice de los crímenes de guerra contra el pueblo palestino de Gaza.
6. La actitud de silencio de Rusia y China, especialmente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, ha dejado al mundo estupefacto.
7. La falta de solidaridad y asistencia por parte de los gobiernos de Egipto y Turquía frente al atropello y matanza de palestinos ha quedado registrado en la historia.
8. La Autoridad Palestina, creada en 1994 producto de los supuestos acuerdos de Oslo, que encabezó por muchos años antes de su muerte, Arafat, se esfumó quedando como una reliquia más de la historia.
9. El reclutamiento de nuevos combatientes voluntarios, por parte de organizaciones fundamentalistas islámicas, se ha multiplicado en todo el mundo musulmán (los países con tradición musulmana suman una población de mas de mil millones de habitantes) desde que se desatara la violenta invasión israelí en Gaza.
La suma de estas nueve verdades descubre una lógica aterradora. EEUU está creando los combatientes enemigos que necesita para continuar su guerra global de laboratorio. Es un enfrentamiento que desencadenó contra un enemigo artificial que bautizó con el nombre de “terroristas islámicos”. Es el escenario imaginario que construyera el “profesor” Samuel Huntington, recientemente fallecido, en su celebrado libro sobre el “choque de civilizaciones”.
Como cierre a los crímenes de guerra que se están cometiendo, cabe destacar que el 14 de diciembre de 2008 – dos semanas antes de la ofensiva contra Gaza - “el Tribunal Superior de Justicia de Israel autorizó los "asesinatos selectivos" de activistas palestinos y no los prohíbe...” De hecho, el Estado de Israel tiene 60 años de estar asesinando en forma selectiva a palestinos. Ahora lo estará haciendo de acuerdo con su propio sistema legal. No son criminales de guerra según sus propias leyes. Sin embargo, son asesinatos y crímenes según las leyes de los demás países del mundo y según el derecho internacional.
Panamá, 8 de enero de 2008.

sábado, 3 de enero de 2009

Revolucion Cubana cumple 50 años

Marco A. Gandásegui, hijo

Quien se levanta hoy con Cuba,
se levanta para todos los tiempos.

José Martí

El cincuentenario de la Revolución Cubana que se celebra hoy debe aprovecharse para mirar hacia el futuro sin dejar de ponderar sobre el pasado. El aporte más importante de la revolución cubana es su extraordinaria experiencia de la cual todos los pueblos pueden aprender para construir un mundo mejor, libre de injusticias, abierto a todos y solidaria en todos los planos. Hoy celebra el pueblo cubano y, muy especialmente, su juventud, junto con mujeres y hombres de todo el mundo que hacen suya la promesa revolucionaria de los héroes cubanos.
Además de mirar hacia el futuro, hay que revisar los logros de la revolución cubana. Para América latina, en primer lugar, desde la década de 1960 ha sido el faro de esperanzas para todos los que creen en un mundo mejor. Jóvenes latinoamericanos de todas las generaciones han luchado convencidos que sí se puede cambiar el mundo de injusticias y abrir trochas por donde pueden caminar todos hacia una sociedad nueva llena de oportunidades.
La Revolución Cubana no sólo ha sido una promesa. A pesar del bloqueo económico y militar norteamericano de casi cinco décadas, la población cubana cuenta con los mejores niveles de salud y de educación en el hemisferio occidental. Es la sociedad que le garantiza a todos sus miembros la mejor seguridad social y donde la criminalidad prácticamente no existe.
En la década de 1960 Cuba se enfrentó y sobrevivió a una invasión norteamericana y a la “crisis de los cohetes”. En ese mismo período alfabetizó a la totalidad de su población y organizó su potencial humano. En la actualidad, Cuba tiene misiones educativas y de salubridad en todos los continentes, apoyando los esfuerzos de muchos pueblos por salir de las tinieblas de la ignorancia.
Es precisamente el presente y futuro cubanos, ese faro de esperanza que ilumina la lucha de la juventud en todos los rincones de la tierra, que despierta la animosidad de quienes quieren bloquear su mensaje. En el siglo XXI Cuba sigue siendo el faro de la esperanza. No es casualidad que con motivo de los giros políticos que ha experimentado América latina a principios de este siglo – con los Chávez, Lula, Evo, Kirshner y otros - todos los análisis comienzan y terminan haciendo la ecuación con Cuba.
No cabe duda que en la lucha de los cubanos contra la adversidad de EEUU se ha elevado, como autentica expresión de liderazgo, la figura de Fidel Castro. A pesar de estar enfermo desde hace dos años, todavía sus análisis escritos son poderosas herramientas en manos de los jóvenes en todo el mundo. Con visión estremecedora, en 2002 Fidel apuntaba a la presente crisis mundial: “El actual orden económico mundial constituye un sistema de saqueo y explotación como no ha existido jamás en la historia. El prestigio de las instituciones financieras internacionales está por debajo de cero... La economía mundial es hoy un gigantesco casino. Por cada dólar que se emplea en el comercio mundial, más de cien se emplean en operaciones especulativas (ajenas a) la economía real”. Aun cuando Fidel ya no es el presidente de Cuba, para todos sigue siendo el Comandante en Jefe de la Revolución Cubana.
La Revolución Cubana no sólo tiene como enemigo implacable las elites gobernantes de EEUU. Fidel anotó en su momento que todos los logros de medio siglo pueden esfumarse producto de los errores de los propios cubanos. La revolución tiene que ser dirigida con habilidad y audacia. Pero existen elementos internos que corroen sus estructuras generando corrupción, una burocracia inmóvil y la rutinización. En estos momentos Cuba atraviesa un período de transición de su liderazgo. Los viejos cuadros del Movimiento del 26 de Julio están cediendo sus puestos a una nueva generación, que enfrenta un mundo cambiado, pero con los mismos problemas – quizás más agudos – producto de un desarrollo capitalista mundial cada vez más contradictorio e injusto.
Cuba ha creado una sociedad igualitaria, donde las diferencias todavía se palpan a nivel de la burocracia y también en cuestiones étnicas y de género. Obviamente, estas diferencias palidecen frente a la explotación clasista y al racismo y sexismo institucionalizados prevaleciente en EEUU y en los demás países del mundo. La cuestión étnica fue planteada por el gran poeta Nicolás Guillén: “el problema negro en Cuba es el problema del blanco”. En otras palabras, es un problema que la nación arrastra como grilletes de su pasado y que se definirá cuando el proyecto de nación llegue a su próximo estadio. El caso del sexismo, también institucionalizada al comienzo de la Revolución, ha experimentado un giro de 180 grados creándose nuevas condiciones.
Cuba no está al margen del desarrollo capitalista. Acusa todos los golpes de las crisis periódicas de su expansión desigual. La diferencia es que Cuba tiene las estructuras económicas y sociales – construidas en los últimos 50 años – capaces de absorber y transformar los traumas que en otros países con estructuras dependientes significan hambrunas y destrucción. Cuba ha logrado transformar una población que en la primera mitad del siglo XX era semi-analfabeta en un ejército de técnicos, ingenieros e intelectuales capaz de enfrentar problemas y resolverlos.
Pero esta transformación no significa que ahora los cubanos sólo son técnicos capaces de resolver problemas. Este es precisamente el anhelo de los capitalistas: tener una población técnicamente capacitada para producir un creciente excedente que luego le es arrancada por el sistema asalariado. El reto y la promesa de la Revolución Cubana es convertir esa nueva capacidad creativa en la plataforma para que aparezcan los nuevos hombres y mujeres de la sociedad pos-capitalista, solidarios y comprometidos con la justicia social.
Un saludo de año nuevo, de 50 años más de Revolución, a los héroes como Fidel, Camilo, el Ché, así como a todos los héroes anónimos que hoy construyen la nueva sociedad en la isla tan amada por Martí.
Panamá, 1º de enero de 2009.